¿Término la crisis?

Marcelo Corrales

Dice Clarín: “La catástrofe, finalmente no llegó. El 2009 no fue un año tan malo para los negocios. Los número uno de Philips, Cadbury, Kimberly Clark, Ford, Claro, American Express, hotel Hilton y Clorox, creen que la recuperación del consumo será el principal impulsor de lo que describen como un rebote de los negocios.”

Dice Critica: “A un día de cumplirse el primer año de la nacionalización del sistema previsional, la ANSES informó que el primer semestre del año arrojó un superávit de 4.204 millones de pesos. La ganancia que experimentó el organismo se explica porque aumentaron las cotizaciones de los bonos y las acciones.”

Dice La Nación: “Los subíndices que miden las expectativas de consumo y las condiciones económicas mostraron un alza de 2,9 y de 3,2%, respectivamente. La intención de compra de casa muestra un importante crecimiento de 22,5%. Se registra una recuperación de ambos subíndices. El de consumo constituyó en los dos últimos meses el motor que impulsó al alza las expectativas generales. Ese repunte, sumado al incremento de 16% de las expectativas de crecimiento de los ingresos personales, puede prenunciar una mejora de las expectativas de consumo en el futuro inmediato, estimó la Untref”

Dice Perfil : “El mercado financiero del mundo emergente sigue beneficiándose de un clima global optimista con estas regiones. Los inversores han salido a buscar oportunidades de rentabilidad de todo tipo y los activos financieros y no sólo los financieros, de Asia y América latina, y algunas commodities les resultan muy atractivas. Para comprar esos activos venden dólares y compran la moneda local. Por lo tanto, la mayoría de los bancos centrales de la región están recuperando reservas y, según cada política monetaria, revaluando más o menos sus monedas, e inyectando más o menos liquidez.”

La fundación Libertad dice a través del portal On24 dice: “La situación económica ha empezado a mejorar para muchos sectores y no se ve lejos, ni en el país ni en el mundo, el fin de la recesión.”

El ex ministro Fernández (el último ministro del innombrable riojano – se acuerda del cordobés) dice que la situación va mejorando.

Todos los medios comentados no son lo que se puede decir “marxistas”, ni aún “progre”… son medios y organizaciones que representan a los mas granado de la derecha neoliberal Argentina.

Si a estos comentarios le agregamos dos o tres ítems como:

El mantenimiento en un alto nivel de los precios de los commodities (cereales, petróleo, etc.), lo que hace que para países como el nuestro, que vivimos de la exportación de materias primas, la situación sea buena.

La devaluación del dólar en relación al euro, al dólar y también al real. Y, como Argentina tiene su moneda enganchada al dólar, de hecho el peso se ha devaluado, en relación a Brasil y a Europa.

La finalización del ciclo de la niña y por lo tanto llovió después de mucho tiempo y eso hizo que aumentaran las expectativas de la próxima cosecha gruesa.

Que la cosecha fina (trigo – cebada) se ha resembrado en algunas partes y en la mejor zona (el sur de la provincia de Buenos Aires), que siempre se siembra y se cosecha más tarde, seguramente será igual que años anteriores.

Todo esto hace un combo positivo para nuestro país. Todo esto indica que habrá una mejoría después de la crisis mundial.

Seguramente habrá un más de actividad, volverá a utilizarse la capacidad instalada de las fábricas argentinas, la construcción volverá a ser motor imprescindible para la reactivación, el gobierno recibirá mayores impuestos por lo tanto podrá programar obra pública.

Por lo tanto… seguramente el gobierno tendrá sus últimos dos años tranquilos en el aspecto económico.

El punto será si esa bonanza que se avecina también será compartida por el grueso de la población o quedará en manos de unos pocos, como ha ocurrido casi siempre en este país.

Y para ello no basta que halla pleno empleo, que por supuesto es imprescindible, sino que la riqueza se distribuya de manera equitativa a los esfuerzos que se hacen.

Ya a esta altura uno no pretende que la renta se distribuya por parte iguales a toda la población, a esta altura querría que por lo menos volviéramos al reparto de la riqueza de principios de los años setenta.

Pero para ello los trabajadores deberían volver a tener el nivel de conciencia, de cultura, de lucha, de esfuerzo, de escolarización que tenían en aquellas épocas.