Hola, ¿ya llegó a su casa?... ¡No! ¿Todavía en el trabajo?... Bueno… pero por mas duro que sea o haya sido el día… es hora de sentarse en el sillón que mas le gusta… y descansar un poco…
Es hora escuchar buena música… y también de pensar un poco…
Pensar ayuda a relajarse… ¡y recordar también!…¡Déle!... sáquese los zapatos y cierre los ojos… Nosotros los ayudaremos con poesías, cuentos, aguafuerte, comentarios

martes, 26 de enero de 2010

¿Las cosas están poniéndose verde oliva?

Marcelo Corrales

De pronto, Duhalde sale a decir en El Salvador que es para combatir el delito en la Argentina es necesario sacar el ejército a la calle. Justo lo viene a decir en El Salvador donde aun no han cicatrizado las heridas de la masacre que el ejercito salvadoreño produzco en la población civil. Decenas de miles de muertos y desaparecidos fueron el producto de lo que se llamó Guerra civil. .

Pero esto no sería nada, siempre hay algún viejo facho argentino que dice estas cosas; pero si a esto usted le agrega que el Ingeniero Macri y toda su caterva de sesudos y deportivos asesores han comprado picanas portátiles para la Policía Metropolitana con el fin de domesticar a los ciudadanos de Buenos Aires, ya la salsa va tomando otro color.

Usted bien sabe a quienes le van a aplicar la picana portátil en la Capital Federal, será a los morochos, a los pobres, a los que porten cara de atorrantes. Siendo mi nieto morocho. ¿Esto atorrantes le pondrán la picana a el también? Por que a veces llora en la plaza cuando no se saca la sortija o cuando algún otro bandido le pega y el no estaba alerta

Pero esto no es todo, por que las picanas y el discurso del ex presidente se debe juntar con los discursos diarios de González Oro, de Tinelli, de Susana Gimenez, de Mirta Legrand, en lo local de importantes radios y de cientos de comunicadores sociales que exigen mano dura para los delincuentes sin guantes.

Todos ellos exigen que se les aplique todo el rigor de la ley y mas todavía a los arrebatadores, ladrones de autos y todo aquel que robe, viole, asesine o moleste simplemente a la gente.

Nada dicen de los ladrones de guante blanco que roban todos los días, nada dicen de los que se robaron el país estatizando las deudas privadas. Nada dicen de los que se robaron las empresas que eran nuestras. Nada dicen de los forajidos con títulos universitarios que trabajan para que los ladrones ricos no paguen impuestos. De eso nada dicen, de eso silencio.

Está mal robar una cartera, pero está cien veces peor quitarle la comida a un humilde. Es peor que te roben la salud de todos a que un muerto de hambre, y atorrante por que no, te despoje la billetera.

Pero por eso no vamos a volver a llamar al ejército. Años nos llevó desactivar esa bomba, y ahora un candidato a presidente vuelva a querer sacar los soldados a la calle.

No será que el ex presidente se está poniendo en línea con las últimas modas que vienen del norte. Vio que para resolver el problema del terremoto y de la pobreza en Haití enviaron trece mil soldados.

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