Seguimos llorando en velorio ajeno

Marcelo Corrales

Poco he escrito en el blog estos últimos días. Es que he salido a recorrer el centro sur del país y quiero compartir con ustedes, mientras sigo discurriendo si ya no tengo nada que transmitirles y por debería cerrar el blog, algunas cosas del largo trayecto realizado.

Lo primero que se viene a la cabeza es que desde mi último viaje en el 2003 al sur de la Argentina, el país es otro, ha cambiado, es un tema fáctico. Usted podrá o no estar de acuerdo con quien quiera, pero es exponencial el crecimiento de la Argentina.

Ciudades como Neuquén, Bariloche, ciudades feas como Santa Rosa de la Pampa, Esquel, Trelew, Rawson o San Antonio Oeste son otras ciudades. Servicios por doquier, la construcción de casas por parte del estado de a cientos. Rutas en condiciones y no concesionadas. En fin todo mejorado.ç

Y no vaya a creer que lo digo por los centros comerciales, las playas o las bellezas naturales, no nada de eso, me he tomado el trabajo de recorrerlas completas, desde sus barrio coquetos hasta los mas humildes.

Salvo Bariloche que lamentablemente continúa con amplios sectores de asentamientos o como quieran llamarlos, en las demás ciudades la construcción de viviendas públicas es realmente impresionantes.

Es cierto que Bariloche es Río Negro y no es una provincia Justicialista, y eso se nota.

Usted dirá que bicho me picó que ahora resulta que veo todo lindo. Puede ser que me picó un bicho, pero lo que la verdad no tiene es remedio (algo así decía Serrat) .

Ciudades pujantes y bellas como Puerto Madryn y Viedma están hechas una pinturita. Por supuesto lugares como Villa La Angostura, El bolsón, Lago Puelo o villa la Ventana son otra historia pues la belleza natural no permite hacer otros análisis.
La provincia de Buenos Aires es también un jolgorio de progreso, por lo menos el oeste desde el sur hasta el norte.

Ahora si Don Biolcati ¿Esos puntos negros, rojos, rojos y blancos o blanco y negros que pululan como mosquitos en los campos de la provincia de Buenos Aires no son las vacas que les estaban faltando?

Todos esos campos sembrados ¿Son los campos que no dan ganancia Don Bussi?

¿Todas esas camionetas con patente I de Ines son parte de la destrucción del campo?.

Se puede tratar de estar mejor, pero como hemos dicho siempre llorar en velorio ajuno es un pecado que será castigado con el máximo rigor cuando les toque el juicio en la otra vida. En esta no tienen perdón.